¿Ustedes saben quién modela la conducta de las familias? ¿Quién rige los patrones de nuestras familias? ¿Quién le dice a nuestras familias cómo tenemos que andar?
No me lo conteste, pero yo le voy a decir algunas alternativas; nuestros padres o nuestros suegros nos fijan el modelo de la familia, nuestros amigos nos fijan el modelo de la familia, el plan; la televisión fija el modelo, muchas veces, de la familia, los amigos de la oficina, de la fábrica, del taller, los compañeros de la universidad o dónde estemos fijan el modelo. Y resulta que hay un plan, que es el plan perfecto de Dios. Pero el plan perfecto de Dios queda relegado por la opinión de toda esta gente que yo les acabo de decir... es que a mí así me crió mi papá, así me dijo mi papá y mi mamá, que es la familia. Y yo me pregunto, eso que nos dijeron nuestros padres ¿está aquí en la Biblia? Si no está en la Biblia, hay que examinar lo que nos dijeron, tomar parte de lo bueno y desechar lo que no es bueno.
Lo mismo pasa con los amigos o con la televisión; si una mujer mira todos los días telenovelas, el plan perfecto de Dios no va a existir, va a existir el modelo de las telenovelas.
Por eso, me da mucho gusto estar aquí esta noche. Es probable, que muchas cosas que digamos de la Palabra de Dios salgan del plan y del modelo que ustedes tienen, pero es bueno eso porque entonces Dios va a remover los escombros de nuestras vidas familiares para que lleguemos a cumplir su plan. ¿Por qué? Porque es perfecto. Y vamos a dejar de lado cómo el mundo, cómo la sociedad ha modelado la conducta de nuestras familias y vamos a ir al plan perfecto de Dios.

Los que tienen Biblia abran su Biblia en Génesis, por favor. Vamos a ir al principio porque yendo al principio vamos a darnos cuenta cuál es el plan perfecto de Dios para la familia. Vamos a abrir el libro de Génesis, el capítulo 1, y vamos a leer desde el versículo 27 hasta el versículo 31.
Allí ustedes encuentran el plan perfecto de Dios para el hombre, para la mujer y para todas las familias de la Tierra.
Génesis 1 desde el 27 hasta el 31, si quieren voltear la silla los que están incómodos mirando para acá, voltéenla no hay ningún problema, así van a estar más cómodos.
Génesis 1:27 dice:

"Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó;
varón y hembra los creó. 
Y los bendijo Dios, y les dijo:
Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla,
y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos,
y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra. 
Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla,
que está sobre toda la tierra, y todo árbol en que hay fruto
y que da semilla; os serán para comer.
Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos,
y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida,
toda planta verde les será para comer. Y fue así.
Y vio Dios todo lo que había hecho,
y he aquí que era bueno en gran manera.
Y fue la tarde y la mañana del día sexto."
Génesis 1: 27-31

Aquí encontramos nosotros, cómo en la mente de Dios había un plan.
Dios no creó las cosas porque sí, había un plan, y cuando Dios traslada ese plan a la raza humana, quiere que el hombre y la mujer, el matrimonio y la familia tengan su mente equipada a su plan, porque muchas veces los seres humanos actuamos instintivamente y sin ningún tipo de propósito, hacemos las cosas porque sí, porque no tenemos objetivos, no tenemos metas, no tenemos nada. Pero van a ver como el plan de Dios nos hace ir a lo que Él quiere.

Dice el versículo 27 que nosotros acabamos de leer: Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó.
Ni las plantas, ni los animales, ni todas las cosas creadas tienen la imagen de Dios. Uno ve la naturaleza y dice, ahí está Dios, pero la Biblia dice que la imagen de Dios la tenemos nosotros, Atributos morales, espirituales, intelecto, sentimiento, voluntad, no la tienen los animales pero sí nosotros. Eso es parte del plan perfecto de Dios para el hombre y para la mujer.

Ahora nosotros, cuando analizamos la palabra imagen, generalmente, pensamos en que por ejemplo, si estoy frente a un espejo, el espejo refleja mi imagen, pero cuando la Biblia habla de imagen, es una cosa mucho más profunda, no habla de algo parecido a... sino que la imagen de Dios, tiene que ver con la forma en como actuamos.
Escúchenme bien, la imagen de Dios en nosotros, tiene que ver en la forma como actuamos. Quiere decir varón, quiere decir mujer, que nosotros reflejamos a Dios. Y yo sé que digo esto y muchos dicen, ay, ay, ay... esto no lo sabía, pero así es, allí está.
Nosotros somos imagen de Dios para reflejar a Dios en la forma en como actuamos; y entonces, cuando yo sé que reflejo la imagen de Dios en la forma en como actúo, voy a hacer honor, tengo que hacer honor a mi Creador.
Dios se dignó, varones y mujeres, darnos su imagen para que nosotros lo representemos a Él, su carácter, su naturaleza todo lo que Él es, nosotros somos los transmisores, somos el reflejo de la imagen de Dios.
Miren qué bajo ha caído la humanidad, que haciéndole caso a la televisión, a los amigos, a quien ustedes quieran, aceptan por ejemplo, que la homosexualidad es un problema genético, mentira. Dios no hace varones, mujeres e intermedios, no. Dios no hace lesbianas, Dios no hace bisexuales, Dios hizo hombres y mujeres, lo otro es una perversión y se está permitiendo en la televisión y se está permitiendo en toda nuestra sociedad y se levantan los homosexuales con derecho. ¿Qué imagen de Dios puede reflejar un homosexual? Más vale que se arrepienta, porque eso es un pecado. ¿Qué imagen de Dios puede reflejar una lesbiana? Más vale que se arrepienta, porque eso es pecado. Dios hizo varón y mujer y cuando yo sé que soy imagen de Dios, voy a reflejar a Dios en su carácter y en su naturaleza, el plan perfecto de Dios.

Pero sigue diciendo en la Biblia en el versículo 28, después que dice, a  imagen de Dios lo creó varón y hembra los creó... dice el versículo 28: Y los bendijo Dios, y les dijo...
Me gusta esto, me encanta; Dios vio a ese hombre y a esa mujer y los bendijo. ¿Saben qué significa bendición? Decir bien de otro.
Cuando un padre y una madre estimulan a sus hijos, cuando le ponen la mano en la espalda y le dicen, vamos hijo que tú puedes, lo están bendiciendo. El mundo está lleno de maldiciones, porque hay maldiciones que vienen de generaciones pasadas donde padres han maldecido a sus hijos y le han dicho, tú nunca vas a ser nada en la vida porque eres un bueno para nada, para qué te habré tenido... Hijos no deseados, hijos rechazados están malditos por padres y por madres que se olvidaron que son imagen de Dios y ese niño trae la imagen de Dios.
Es que nos hemos quedado viviendo como matrimonios, como seres humanos a niveles muy superficiales sin subir al plan perfecto de Dios. Cuando Dios dice, cuando la Biblia dice: y los bendijo Dios… la mirada y las manos de Dios se posaron sobre ese hombre y sobre esa mujer; porque era algo muy bueno lo que Él había creado.

Querido varón, querida mujer Dios te quiere bendecir, ya tienes la bendición desde hace mucho tiempo, pero ¿sabes qué? Si alguno de tu familia te maldijo, al final de esta reunión vamos a cancelar con esa maldición. Hay padres que maldijeron a sus hijos con maldición de pobreza y nunca salen adelante en la vida económicamente, porque tienen una maldición sobre sí. Hay chicas que nunca se casan, porque sus madres les han dicho, con tu carácter nunca te vas a casar. Y las palabras de los padres tienen poder, es muy serio lo que estamos hablando.
Dios bendice a la gente, y Satanás utilizando sus instrumentos, maldice a la gente. Por eso tenemos que ir tras la bendición de Dios y cancelar toda maldición que nos haya alcanzado.

Ahora, Dios no solamente bendijo a esta primera pareja. ¿Quieren ver la extensión de Dios en cuanto a su bendición? Vayamos por favor un poquito más adelante, Génesis capitulo 12 y versículos 2 y 3... Génesis capitulo 12 y versículos 2 y 3.
Dios había llamado a Abram y le había dicho: Abram salte de tu tierra y de tu parentela, a  la tierra que te mostraré. y miren lo que dice Génesis, 12: 2 y 3:

"Y haré de ti una nación grande,
y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre,
 y serás bendición.
Bendeciré a los que te bendijeren,
y a los que te maldijeren maldeciré;
y serán benditas en ti todas las familias de la tierra."
Génesis 12: 2-3

¿Escucharon eso, leyeron eso? Dios le dice a Abram: Abram Yo te llamé porque tu propósito, el propósito que Yo tengo para ti es un propósito de extensión mundial; y conforme Yo te bendigo a ti Abram, voy a bendecir a todas las familias de la Tierra y tú eres una familia de esta Tierra, la bendición de Dios dada a Abram hace muchos siglos atrás nos alcanza a nosotros hoy.
¿Sabes por qué Dios te quiere bendecir? Porque tú y yo somos su creación, valemos mucho para Dios, por eso Dios nos bendijo. ¿Y sabes? Cuando nosotros nos alejamos de Dios, Dios envío a Jesús a morir en la cruz del Calvario a morir por ti y por mí, ¿para qué? Para que volvamos a tener la bendición. Y si tú esta noche estás aquí y no tienes a Jesús en tu corazón, al final te voy a invitar para que recibas la bendición de Dios abriendo tu corazón, arrepintiéndote de tus pecados, diciéndole, Jesús quiero ser salvo.

Dios te quiere bendecir, varón, mujer si has sido maldecido por alguien hoy esa maldición se cancela, porque Dios te quiere bendecir, quiere bendecir tu casa, quiere bendecir tu familia, quiere bendecir tu trabajo, quiere bendecir a tus hijos, quiere bendecir a tus nietos. Y quiere que seas motivo de bendición para toda la colonia dónde tú vives. El plan perfecto de Dios, familia.

Dios bendice a dos, pero después le dice a Abram: serán benditas en ti, todas las familias... familias... Dios bendice a la familia.
La familia es creación de Dios, la unión libre no tiene nada que ver con el plan de Dios, cuando un varón se compromete con una mujer a casarse, esta yendo detrás del plan perfecto de Dios, la unión libre establece que no hay ningún compromiso, ni de su parte ni de mi parte y Dios trabaja por pactos, porque el matrimonio es un pacto.
Tampoco Dios dice, que dos varones se junten y se unan en matrimonio y adopten hijos; ese no es el plan de Dios. El plan de Dios es: varón y hembra, hombre y mujer, que se casen.
Tampoco que dos mujeres se casen y una adopte el papel varonil y la otra el papel femenino ahí no está en la Biblia. Es probable que Dios llame algunos a quedarse solteros por causa de su Reino, eso esta en Primera Corintios capítulo 7, y eso está muy bien. Pero en general, el plan perfecto de Dios, es la familia y cuando le dijo a Abram te voy a bendecir a ti y a todas las familias de la tierra, estaba estableciendo un modelo para vivir correctamente en su ciudad, familia.

Seguimos... luego que dice el versículo 28, y los bendijo Dios…
Sigue diciendo, versículo 28 del capítulo 1 de Génesis. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad… vamos a quedarnos aquí, por favor.
Lo primero que Dios les dice es, fructifiquen.
Le voy a explicar lo que esto significa, lo voy a explicar con un ejemplo, si ustedes tienen un manzano en el patio de su casa ¿qué esperan del manzano? Que dé manzanas. El fruto de un manzano es la manzana. Y al tiempo, nosotros esperamos ver que el árbol produzca, escuchen esta palabra, produzca manzanas. Dios les dijo a los dos, fructifiquen, no sean improductivos, sean productivos. ¿Saben a qué se refirió Dios con esto? Dios le dijo: Adán, Eva, árboles, flores, animales, mares, ríos; todo eso lo puse para que ustedes lo administren, sean productivos hagan crecer lo que Yo les di.
Lo voy a poner más fácil, más simple: Ser productivo significa, trabajar... trabajar. Ser productivo significa liberar el potencial que tenemos en nuestro interior. Dios, en cada uno de nosotros puso un potencial, una habilidad, un recurso, algo que cuando sale de adentro, entonces nosotros estamos glorificando a Dios con eso que puso, porque el potencial que tú y yo tenemos Dios nos lo puso. El potencial se libera mediante el trabajo; la sociedad que vivimos hoy en día le dice al hombre y a la mujer, mira, si con la ley del mínimo esfuerzo puedes conseguir algo, has el mínimo esfuerzo, no trabajes... trabaja poquito, llega tarde al trabajo y vete temprano. Si los muchachos van a hacer huelga, métete en la huelga porque han avasallado nuestros derechos.
Dios le dijo al hombre y a la mujer, fructifiquen... sean productivos.
¿Qué pasa con el árbol de manzana que a mí no me da fruto? ¿Qué pasa? ¿Qué hago? Lo corto y lo tiro que se lo lleven los basureros.
Dios no nos hizo para ser improductivos, si yo tengo un árbol de manzana que no me da manzana, lo corto, no lo aguanto ni dos meses lo hecho a la basura.

Gracias a Dios que Él no nos echa a la basura, pero tenemos que aprender a trabajar, esto se lo digo al varón, pero también a la mujer. Yo siempre digo que es un error cuando el varón siente que la mujer tiene que proveer el ochenta por ciento y él el veinte para la casa. No, es al revés, el varón el ochenta y la mujer el veinte, yo estoy de acuerdo en que la mujer trabaje, porque la mujer tiene un potencial que liberar, pero lo que la Biblia no dice, es que la mujer sostenga el hogar; y la cultura nos ha engañado, yo tengo un familiar que piensa así, si la mujer gana más que yo ¿para qué voy a trabajar? En serio varón, ¿sabes qué? El diablo te esta atando con eso, porque no estas cumpliendo el plan perfecto de Dios. Cuando Dios dijo, fructifiquen, lo que Dios esta diciendo es, sean productivos, trabajen y liberen su potencial... Fructifiquen.

En la mente de Dios está que el hombre y la mujer sean productivos, no la improductividad, no el conformismo, no me tengo que ajustar a lo que tengo. ¿No puedes hacer más? ¿Por qué te tienes que ajustar a lo que tienes, quién te lo dijo? Ésa es una educación que recibimos.
Mira querido, con que tú tengas una tortillita y le pongas un poquito de sal, suficiente ¿y quién te dijo eso? ¿De dónde salió esa cultura? Error de nuestros padres y abuelos. Dios nos dio un potencial para desarrollarlo y fructificar.
Dios dijo, fructifiquen, no dijo, confórmense. No estoy hablando del amor al dinero que es la raíz de todos los males, me están entendiendo ¿verdad? No estoy hablando de eso, estoy hablando de sacar lo que tengo adentro.
Mire, lo que le voy a decir le va a estallar la cabeza con esto: Cuando uno entiende lo que significa fructificar, va a trabajar por amor al trabajo y no por amor al dinero, yo sé lo que está pasando por la mente, le estoy revolucionando la mente, porque nosotros decimos, no, no querido si no hay dinero, no.
Adán y Eva no tenían dinero, vivían de las plantas, de los árboles y de todo lo que más abajo dice, de los animales… de eso vivían, no tenían dinero.
En nuestras sociedades antiguas no tenían dinero, bueno había trueque, ustedes saben. Pero cuando un hombre, cuando una mujer trabajan por amor al trabajo por liberar el potencial, esta reflejada la imagen de Dios. Si no lo entienden no lo rechacen, reciban esto que les estoy diciendo y vuelvan a escuchar este mensaje; y pídanle al Espíritu Santo que les revele lo que estoy diciendo, porque nosotros creemos que el trabajo es una maldición... ¡mentira el trabajo no es una maldición! Dios sí, le dijo al hombre, con el sudor de tu frente vas a ganar el pan, después del pecado. Pero nunca Dios maldijo el trabajo porque si Dios hubiera maldecido el trabajo, Dios nunca hubiera trabajado y nunca Jesús hubiese dicho en Juan capítulo 5, como mi padre trabaja, yo también trabajo.
El trabajo glorifica a Dios y hace que reflejemos la imagen de Dios. ¿Quieres salir de tu mala condición económica? Ponte a trabajar, pero en serio, cambia de trabajo si es necesario y Dios te va a bendecir.

Pero luego dice: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra. Miren, esto de multiplicaos, tiene que ver con los hijos. Y Dios le dijo llenen la Tierra. ¿Ustedes no creen, que cuando Dios formo a Adán y Eva, podía haber formado a los casi seis mil millones de habitantes que somos ahora? Sí ¿No? Pero a Dios no le gustan las cosa instantáneas, ¿pescaron la onda de Dios? No, les dijo muchachos: Adán, Eva, ahí les puse todo, pero ahora ustedes van a trabajar, van a fructificar, pero también van a traer al mundo a esos hijos. Yo se los podía haber dado instantáneamente, dice Dios, pero no quiero, quiero que ustedes trabajen para eso. ¿Saben por qué? Porque tener hijos no es un asunto sexual... Quedé embarazada y ya, no... Cuándo Dios te da un hijo, ¿qué dice la Biblia? Que herencia de Dios son los hijos, cosa de estima, el fruto del vientre...
Por eso Dios no está de acuerdo con el aborto. Y uno dice ¿y la chica que fue violada? No importa, Dios sabía eso, déjenla tener al hijo. Multiplicaos, es decir, que cuándo Dios te manda un hijo ¿sabes qué te manda? Trabajo.

Escuchen, las familias modernas interpretaron el trabajo con el hijo en tres o cuatro renglones, a saber: comida, escuela y algún bienestar económico. Muchos padres dicen: bueno, yo me conformo con que llegue a tal edad y él tenga su título de “x” cosa, le doy bien de comer y ése es el todo. Le pago la mejor escuela, la colegiatura y si le puedo regalar un coche, le regalo. ¿Sabe qué es eso? Eso está al nivel del piso. Queridos, es más que eso, un título a tu hijo no lo hace ir detrás de la imagen de Dios, que le compres un coche no lo hace ir detrás de la imagen de Dios. Dios te lo dio para formarlo, trabajo.

¿Saben qué significa formar? Poner aquí y en todo su ser valores morales y espirituales emanados de la Palabra de Dios. Plan perfecto.
Cómo quisiera poder desarrollar este tema con mucho más tiempo, pero no puedo, déjenme decir dos o tres cosas. Vamos a Deuteronomio 6, antes busque Deuteronomio 6, porque después de leer Deuteronomio 6 les voy a decir lo que el Señor puso en mi corazón. Deuteronomio el capítulo 6, ése es un pasaje clave para entender lo que Dios quiere de cada uno de nosotros. Deuteronomio, el capítulo 6, versículos 1 y 2.

"Estos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos
que Jehová vuestro Dios mandó que os enseñase,
para que los pongáis por obra en la tierra a la cual pasáis
vosotros para tomarla; para que temas a Jehová tu Dios,
guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando,
tú, tu hijo, y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida,
para que tus días sean prolongados."
Deuteronomio 6: 1-2

Vamos al versículo 6…

"Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa,
y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales
entre tus ojos; y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas." 
Deuteronomio 6: 6-9

Sus preceptos estuvieron por todos lados en la vida del chico, por todo lados, en sus manos, en su frente, en todos lados, pero hoy en día, es muy difícil encontrar padres que quieran pasar tiempo con su hijo formándolos moral y espiritualmente, tenemos una crisis de valores impresionantes, la gente miente con toda naturalidad, la gente es infiel con toda naturalidad, la gente no es íntegra. Estoy hablando de valores; la gente piensa que la obediencia es condicional, valores que se han perdido.
Mi abuelo, cuando yo era chico me contaba, mira hijo me decía ¿sabes qué? Cuando yo le prestaba dinero a alguien o me prestaban dinero, yo nunca tenía que firmar documentos, porque dice, yo le decía mira, tú me prestaste este dinero pero dentro de un mes, el día treinta y uno yo te lo devuelvo y yo no firmaba papeles, el día treinta y uno iba y le devolvía el dinero. Pregúntenme si hoy pasa eso. ¿Saben quién está modelando la conducta de tu hijo? Olvídense, la televisión, a la altura del internet no es nada, el internet está empezando a ser el peor enemigo de las familias, porque tus hijos se meten en la internet... Es impresionante lo que está pasando.
Uno de los pastores de nuestra iglesia, encontró en su internet hace tres días, una foto de una lesbiana hablándole a otra lesbiana y le metieron a él el mail, el mensaje. Los chicos, hoy en día tienen sexo por realidad virtual a través del internet... ¿y los padres? Volando por el aire... Mi hijo es un buen chico, jamás.

Tenemos que formar jóvenes como José, ¿se acuerdan de José? José fue envidiado por sus hermanos, sus hermanos lo envidiaron tanto por los sueños que él tenía, que lo arrojaron a una cisterna. Después lo sacan de ahí y lo venden y aparece en Egipto, ¿dónde aparece? Potifar lo toma y entonces, Potifar lo pone como mozo, como servidor de él y un día, la mujer del Potifar dijo, este muchacho me gusta, y lo toma y lo lleva a su cama, y le dice ¡acuéstate conmigo! ¿y el muchacho que podía hacer? Es la señora, miren que privilegio. ¿Señora usted quiere tener relaciones conmigo? Pero encantado. Él dijo: ¡NO! Esos son los chicos que hay que formar. Esos que le digan no al pecado, que le digan que no a la mentira, que le digan que no a la fornicación, que le digan que no al adulterio, pero eso es tarea de los padres. Por eso Dios dijo, multiplíquense, pero con propósito. No quedar embarazados porque sí; y entonces, va la mamá y le pregunta la mamá a la abuelita cómo tiene que criar a los hijos, vete a la Palabra.
¡Hay crisis de lectura! La gente de hoy en día no quiere leer, sufro y lucho porque la gente lea. Escuchen bien lo que voy a decir, el peor enemigo de nuestros países, no son las crisis económicas, no son las crisis petroleras, no son las crisis de la bolsa cuando la bolsa se cae, ¿saben cuál es el peor enemigo de nuestros países latinoamericanos? La ignorancia. Porque cuando somos ignorantes nos agarran de las narices y nos llevan a cualquier lado.
Por eso, la gente se mete en ocultismo, en ouija, en brujería, en hechicería, en taekwondo, en karate, en todas esas tonterías diabólicas... Y dejamos a nuestros niños ver la televisión y las caricaturas que después no pueden dormir en la noche, ¿de qué se trata? ¿Qué hijos queremos? Ah no, pero yo le di escuela... ¿y qué escuela le diste, si no está formado para la vida? ¡Ah! Pero le di coche ¿y de qué le sirve el coche?

Cuando Dios dice llenen la Tierra, dice llenen la Tierra con hombres y mujeres con propósito.
Estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón y las repetirás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos, y en el camino y cuando te acuestes y cuando te levantes, y la tendrán en la frente y la tendrán en las manos y la tendrán en el cuerpo... ¡eso es! El plan perfecto de Dios.
Pero no que miren la televisión así yo salgo y hago otras cosas.
El otro día, una esposa de uno de nuestros pastores me dijo, o nos dijo: Ahora que hicimos una escuela bíblica de vacaciones las mamás se acercaron y le dijeron: Lety, por qué en lugar de una semana de escuela bíblica de vacaciones no hacen dos semanas así me saco de encima a los hijos. ¡Estamos mal! Eso no es el plan perfecto de Dios. Y después nos preguntamos porque nos va mal. Y después les echamos la culpa a los chicos de la rebeldía. ¡Es nuestra culpa adultos! ¿Cuándo leíste un libro por amor a tu hijo? ¿Cuándo te sentaste con tu hijo, varón, papá, a hablarle de sexo? Como varón, papá ¿por qué lo tiene que formar la escuela o los amigos? Mamá ¿por qué a las chicas tiene que sorprenderlas la menstruación? Y no saben absolutamente nada ¿por qué y para qué es la menstruación?
Yo soy pastor, entonces la gente dice, pero pastor yo no lo sé. Le dije, escúchame: hay miles de libros infórmate, por favor, no vivimos en la época en que no hay libros, infórmese.
Ayer estaba viendo el caso de Gloria Trevi y el de este otro fulano que está con ella, Sergio Andrade, han formado una industria del sexo, de la fornicación y de toda la porquería que anda por ahí. Y nuestros jóvenes andan alabando a Gloria Trevi ¿de qué se trata? ¿Sabe por qué? Porque no están formados.
Ése no es  el plan perfecto de Dios. Llenen la tierra de hombres y mujeres que reflejen la imagen de Dios; ¿saben qué? Entonces México va a cambiar. Yo no voy a ceder nunca a la corrupción, a la violencia, a la inseguridad, a todo lo que está pasando en este país y en otros países. Porque sé qué, cuándo como cristianos nos levantamos, entonces vamos nosotros a cambiar todo este país. Antes yo creía que no se podía, ahora creo por el poder del Espíritu Santo. Por eso, es que si yo vine a predicar esta noche no es para pasar un rato, es para que salgan de aquí incómodos, molestos y que vayan a sus casas y rompan todo lo que tengan que romper y quiten todo lo que tengan que quitar y pasen más tiempo con sus hijos, no solamente darle su domingo, no sirve así no se forman hijos. Pero nosotros los varones decimos, no, ése es trabajo de la madre, el hijo va y le consulta, papá me das permiso... no, no,  tu madre... tu madre... yo... no...no... estoy cansado.
Por eso, el diablo se mete en tu hogar, porque tú delegas, abdicas de tu autoridad y entonces el diablo se mete en tu hogar, porque tú varón no quieres problemas. No, yo con que de mi quincenita... y bueno, mal quincena porque ni siquiera alcanza; pero arréglate cómo puedes.
Es otra cosa familias, la vida en sociedad, la vida de familia es otra cosa que la que nos han enseñado.

Ahora, multiplicarse no solamente significa hijos. Todos nosotros tenemos un ámbito en el cual nos movemos, nuestro trabajo, nuestra la escuela, el supermercado, las amigas, los amigos. ¿sabes qué? Todo esto que yo estoy diciendo, llévate el mensaje y regálaselo, empieza a cambiar tu mundo de alrededor. ¿Me están entendiendo lo que digo? Tenemos que afectar al mundo de alrededor, tenemos que empezar por la casa, pero tenemos que ir a la oficina y decir: La mentira no, el fraude no, el robo no. Esto no, no. Tenemos que empezar a decir, no. Tenemos que empezar a decir no al halloween, porque el halloween es una fiesta satánica. Pero los papás tienen miedo que a mi hijo lo van a echar del colegio y lo estas atando con lazos satánicos por vestirlo de negro y meterle todas esas tonterías. Ponte a leer, ponte a leer a ver qué significa halloween, no es una fiesta, es una fiesta diabólica entregada a Satanás, la noche del treinta y uno de octubre salen todos los espíritus demoniacos, están haciendo una fiesta a Satanás y ahí están nuestros hijos, ¿de qué se trata? Ése no es el plan de Dios. Infórmate, por favor.
Vamos a cambiar el mundo de alrededor, vamos a ir a la escuela y le vamos a decir, maestra, mi hijo no va a participar del halloween, pero ¿por qué? Y cuándo tú estudies lo que es el halloween, le vas a decir porque y si te lo echan del colegio ¿sabes a quién tienes ahí arriba? A Dios y Dios te soluciona el problema.
Nosotros les tenemos más miedo a los hombres que a Dios, tenemos más miedo que echen a los hijos de la escuela, que a Dios que me puede proveer otra escuela para los hijos. Estamos mal, no creemos en el poder del Espíritu. Lo cantamos acá, sí acá se canta todo, levanto las manos, cantamos todos, pero el lunes, mañana, no... es que es otra cosa pastor, la iglesia es una cosa y afuera es otra cosa. Ésa es otra mentira del diablo. O somos o no somos, hipocresía, no. El plan perfecto de Dios.

Déjenme continuar. Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra… Y luego dice, hay perdón me quedé con el pasaje de Deuteronomio, en Génesis capítulo 1 para poder leer después de fructificad y multiplicad y llenar la tierra, versículo 28, dice: Y sojuzgadla… ¿saben lo qué significa sojuzgar? Gobernar. Esto produce un cambio en cada uno de nosotros, cuando yo sé que gobierno algo empieza a cambiar en mí. Nos hemos dejado gobernar por muchas circunstancias. Pero déjeme completar el pensamiento, luego de sojuzgar, que significa gobernar, dice: Y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra… ¿saben lo qué significa señorear? Tener dominio. Ese es el pan de Dios, gobernar y tener dominio.

¿Qué pasa con nuestra sociedad? Ni gobierna, ni tiene dominio.
Nos hemos achicado tanto que somos víctimas de todas las circunstancias, soy víctima de la enfermedad, hay gente que le encanta andar enferma, le encanta, hoy el hígado, mañana los riñones, pasado la rodilla, después la artritis. Le encanta andar comentando enfermedades. Yo digo esto porque tengo familiares en Argentina que viven así, piensan así ¡fíjense! Dios dice: gobierne y sean señores, pero resulta que una cosita así de diez centímetros me domina a mí, estamos mal ¿cómo empezó? Y una cosa social... ¿cómo no voy a fumar si todos fuman? Y ahora no se puede salir, somos esclavos del alcohol, un día papá puso una cerveza ahí arriba de y dijo ¡hijo sé hombre, toma! ¡Qué barbaridad!
Tú eres hombre porque Yo te hice hombre, no necesitas tomar para ser hombre. Y dicen: yo lo dejo cuando quiero, sí, la bebida te va a dejar a ti no tú cuando quieras. Lo mismo pasa con la droga, lo mismo pasa con el sexo ilícito. El dinero nos domina.
Y Dios dijo: gobiernen y sean señores y dominen, el dinero los domina, nos sentimos bien cuando acá hay, es otra cosa. ¿Por qué? Yo soy quien soy porque soy la imagen de Dios, tenga o no tenga dinero, pero ¿qué pasó? Dejamos el gobierno de lado y el dominio y se lo entregamos a Satanás, Adán y Eva se lo entregaron a Satanás y a partir de ahí nuestras sociedades se vinieron en picada, ni gobernamos, ni dominamos nada.
Los padres no pueden gobernar ni dominar a sus hijos, el presidente no puede con los de la UNAM. ¡Fíjese que están haciendo los paristas! Esos muchachos están revolucionando al país ¿sabe por qué? Porque no estamos en el plan perfecto de Dios y Dios quiere que tú, varón y tú, mujer gobiernes y los dos sean señores de todo lo creado, de ti mismo y de todo lo que te rodea.

Estamos atados por las circunstancias, cuando Dios dice: Yo quiero que ustedes pisen a las circunstancias, la Biblia dice que cuando uno es cristiano tiene la mente de Cristo pero resulta que la mente de Cristo en los cristianos, siempre nos mantiene derrotados. Cristo no tenía una mente de derrota ni de fracaso, Cristo tenía una mente de vencedor, Cristo tenía una mente victoriosa, pero varones y mujeres nos damos por vencidos rápidamente, entonces, el matrimonio no funciona. Viejita... divorcio ¿quién dijo eso? Es que me lo aconsejó mi psicóloga... uhhh ¿Y la Biblia qué dice? Es que pastor usted no sabe con mi marido ya no lo aguanto más ¿y te pusiste a ayunar y a orar pero en serio para que Dios cambie a tu marido? ¿Ve cómo escuchamos las voces de afuera? Es más fácil divorciarse que pelear por el matrimonio, porque eso es lo que quiere el diablo, divorciar y tú te divorcias y tus hijos, pobrecitos la marca que les queda, pero tú te saliste con la tuya, tú no lo aguantas más al viejo ese, pelea por tu matrimonio, varón pelea por tu familia, gobierna, domina, se cabeza conforme es tu cabeza, Jesucristo. Satanás está deseando que todo el mundo se divorcie pero el plan perfecto de Dios es la familia, tú dices, pero yo me casé equivocada, me casé equivocado pero ahora encontré, no encontraste nada, encontraste engaño, lucha por lo que tienes.

Por eso me gustó venir esta noche, porque tenemos que hacernos gente que luche, que batalle, que logre tener un matrimonio y una familia de acuerdo al plan de Dios, métete con Dios, empieza a hacer guerra espiritual, combate a Satanás y vas a ver cómo funciona el matrimonio, empieza a cambiar.
Que el Espíritu Santo te revele, no lo que el otro tiene que cambiar, lo que tú tienes que cambiar y entonces vas a ver cómo cambia la cosa; ése es el plan de Dios. Es muy fácil casarse y decir a los tres años me divorcio, siempre va haber diferencias, pero resulta que hay una cultura que le dice a la chica cuando se casa, y yo lo escuché, yo prediqué en una boda, predique en muchísimas, pero prediqué en una boda que al final la mamá se acercó a la hija y le dijo, hija si este patán te da mala vida regrésate a casa otra vez, ¿de qué se trata? La Biblia dice que dos son uno cuando se casan, pero los padres por esa educación vieja, obsoleta y no bíblica le abren la puerta al divorcio. Hija, si ese patán te da mala vida vente a la casa otra vez... No, ellos ya no son más dos, son uno y ellos tienen que luchar por su matrimonio, el plan perfecto de Dios.

Dios dijo: gobiernen y sean señores y yo quiero invitarlos hoy a ustedes, matrimonios cristianos, a comenzar a gobernar y a ser señores y a dominar, eso no tiene nada que ver con la cuestión de la humildad, nosotros creemos que ser humildes es ser humillados, no es así ¿saben qué es ser humilde? Es ser quien uno es y como uno es, es ser auténtico.
La palabra humilde en el griego viene de humus, humus significa tierra. Humildes, ser de tierra, ser como uno es. Nosotros somos un estereotipo de lo que somos, mostramos algo que realmente no somos, eso no es humildad, eso es hipocresía, nos ponemos la careta, Dios no quiere eso, Dios quiere hombres y mujeres que gobiernen, que dominen siendo como son, modelados por el Espíritu Santo, no apariencia de piedad, piadosos de verdad, no atados a legalismos, no hagas, no toques, no gustes, no comas; eso es legalismo, a Dios no le gustan.
Sé cómo tiene que ser, ven a la Palabra, la fuente y entonces, vas a entrar en el plan de Dios. Pero tenemos que quitarnos de la mente la idea de que somos víctimas de las circunstancias, víctimas de la economía del país, víctimas de un mal gobierno, no señor y menos cuando somos cristianos.

En oración podemos cambiar todas las circunstancias, vamos a empezar a gobernar nuestra casa. ¿Sabes una cosa? Tú tienes un jefe en tu oficina, tienes un gerente, tienes un director, desde el punto de vista laboral él puede ser más que tú, pero desde el punto de vista espiritual tú eres más que él.
Escucha bien lo que te estoy diciendo, tú eres más que él, porque la Biblia dice que nosotros somos luz del mundo y dice que somos sal. Él no es ni luz ni sal, él esta desabrido y en tinieblas, pero toma tu posición de gobernador, de gobernadora, de señor, de señora, pisa fuerte porque eres cristiano, ese es el plan de Dios.
Y cuando empecemos a vivir así ¿sabe lo que va a pasar? La gente va a decir: oye, yo veo algo diferente en ti ¿qué tienes? Es que entendí el plan de Dios. Y cuando venga una amiga y te diga me quiero divorciar, no espérate un momentito... momentito, no, no, no va por ahí. Fíjate que mis hijos, la rebeldía, que la droga, a ver vamos a conversar, ¿dónde está el problema? Y entonces ya ustedes saben todo lo que hemos hablado y le piden iluminación al Espíritu Santo, y entonces van a ser canales de bendición para otros.
Dios le dijo a Abram, Abram te voy a bendecir, contigo, a todas las familias de la Tierra.

Ya quiero finalizar esta plática, yo quiero hacer dos invitaciones.
La primera invitación la quiero hacer para aquellos que esta noche están aquí, no sé si vinieron por primera vez o ya asistieron alguna u otra vez al culto de esta iglesia, pero que son personas; hombres y mujeres, matrimonios, hay jóvenes también, me da muchísimo gusto ver jóvenes esta noche, solteros, esta primera invitación tiene que ver con aquellos que nunca se enfrentaron con Jesús y le dijeron, Jesús limpia mi pecado. A lo mejor tienen una religión, ¿qué lograste con tu religión? ¿Sabes si vas al cielo o vas al infierno? Ay, eso no se puede saber... Sí, la Biblia dice que el que cree en Jesús tiene vida eterna y va al cielo.
¿Qué lograste con todas las obras que te hace hacer tu iglesia? ¿Lograste algo? Pero dice la Biblia que hay paz en nuestro corazón cuando venimos a Jesús. Y venir a Jesús significa rendirnos ante Él y decir, Jesús entra a mi corazón, limpia mi vida de todo pecado, eso implica arrepentimiento, y si tú te arrepientes en esta noche, Jesús entra a tu vida y te hace una nueva persona.
Y yo quiero invitarte, no a una religión, quiero invitarte a venir a Jesús, porque él te va a dar descanso, paz y perdón de pecados.
A quienes quieran esta noche rendirse a Jesús, arrepintiéndose de sus pecados, yo los invito ahí a donde están, a levantar su mano, si nunca antes usted tuvo esta experiencia y quiere hoy entregarse a Jesús levante su mano, por favor.

Es una decisión ¿saben qué? Es la más importante de su vida, ser hijo de Dios.
Por eso si usted no tiene a Cristo en su corazón, todo lo que hablamos no va a servir para usted, porque usted no es hijo de Dios. Pero si usted viene a Jesús y se transforma en hijo de Dios, entonces va a poder vivir lo que prediqué esta noche.
¿Quién quiere esta noche, voluntariamente, entregarse a Jesús para que él perdone sus pecados? Hombre, mujer, casado, soltero; es una invitación amorosa de Él. Si son todos cristianos ¡qué bueno! Pero sabe, es muy importante tomar decisiones.

Bien, la otra invitación que quiero hacer es a las parejas, a los jóvenes, a todos los que están aquí, que ya son cristianos. Luego de cada mensaje, tenemos que tomar decisiones, esto yo lo aprendí, porque yo antes no hacia lo que hago ahora, yo dejaba el mensaje y que cada uno se arreglara, pero Dios me dijo, no, desafía a la gente a tomar decisiones, no estás para dar conferencias, estás para cimbrar  con la Palabra.
Y yo quiero invitar a estos matrimonios o personas que están solas o jóvenes, a venir al plan perfecto de Dios. Y para venir al plan perfecto de Dios ¿sabe qué hay que hacer? Dejar el pasado atrás, echar abajo todo lo que no sirve, cancelar las maldiciones del pasado y empezar a vivir una nueva vida en el poder del Espíritu Santo con parámetros totalmente diferentes a los que habíamos vivido hasta aquí, cambio, cambio, cambio.
Si no cambiamos, nada cambia, si no cambiamos nosotros, la familia no cambia, el país no cambia, la oficina no cambia, la fábrica no cambia, nada cambia. Cambios, tomando decisiones a la luz de la Palabra.
Por eso, quiero esta noche, invitarlos con todo mi amor y si están desafiados mucho mejor porque van a cambiar, a todos los matrimonios o los jóvenes o los que sean solteros que quieren venir a este plan perfecto de Dios, comprometiéndose a vivir de esta noche en más, una vida nueva y diferente; que se pongan de pie porque vamos a orar.