El Sábado 18 de Octubre de 2003, organizado por la iglesia "Casa Grande", se realizó en un céntrico hotel de la ciudad de Buenos Aires, Argentina, el seminario apostólico-profético denominado "La Restauración de todas las cosas".

Los pastores Schoba y la iglesia "Casa Grande" están bajo la cobertura espiritual del ministerio y el seminario se desarrolló como parte de una labor específica que consistió en la colocación de las bases y fundamentos doctrinales apostólicos y proféticos, de acuerdo a Efesios 2:20, en la mencionada congregación de Buenos Aires.

El seminario contó con una asistencia aproximada de unas
80 personas, entre las que se contaban, líderes denominacionales, pastores, líderes eclesiásticos,

encargados de ministerios, miembros de la iglesia local

y de otras congregaciones.


La enseñanza impartida se dio en el marco de analizar por qué la Iglesia perdió los fundamentos apostólicos y proféticos, transitando la historia desde el siglo I hasta
nuestros días y cómo Dios está restaurando el modelo original del cual hablaron los profetas en el tiempo antiguo.

Conforme a esto, también se dieron las pautas de cómo el Señor está restaurando su gobierno teocrático a la Iglesia a través de apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros.

Se analizó cuidadosamente que, hasta que el gobierno teocrático no sea restaurado, la Iglesia no será equipada en las cinco unciones ministeriales y no podrá llegar a la unidad de la fe; mientras que si estos cinco ministerios, que son dados a todo el cuerpo de Cristo, están presentes, entonces ese cuerpo, llegará al varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.

Barreras denominacionales caerán y el cuerpo de Cristo, perfectamente conjuntado con su cabeza, Jesucristo, podrá implantar el reino de Dios en el mundo.


Hubo gran interés en los asistentes, reflejado por las preguntas formuladas al final del mismo y que fueron contestadas por los hermanos Dardano y Cipolla.
Posteriormente al seminario, hubo casi una semana de reuniones específicas en la iglesia "Casa Grande",
donde el equipo apostólico-profético, con estricto apego
a la Escritura, colocó los fundamentos para que ese cuerpo local crezca sólidamente, exprese y manifieste a su cabeza, Jesucristo.
¡Gloria sea al Señor!