Creo que a través de la historia, los hombres y las mujeres en el mundo, en lugar de oír exclusivamente la voz de Dios, comenzaron a oír otras voces, otros conceptos, desafiando lo que era la verdad absoluta de Dios, lo que de Dios salía limpio, genuino, auténtico, sin mezclas, porque Dios es perfecto.
Pero cuando los hombres y las mujeres en el mundo, empezamos a escuchar otras voces, todo lo que era el diseño original de Dios para las naciones, para el mundo, para el desarrollo de la sociedad, no solamente se fue corrompiendo, fue comenzando a perder efectividad. Y ahí es donde vemos entonces a los seres humanos haciendo enormes esfuerzos por reflotar propósitos, por tratar de ponerle cuñas a los países, a las crisis económicas, y tratar de levantar, de acuerdo a su criterio, cosas que solamente a través de Dios se podía levantar.
Por eso hoy hablamos de materialismo, hoy hablamos de humanismo, cuando en realidad debiéramos estar hablando de la voz y la dirección de Dios para todas las naciones de la Tierra, y obviamente, para su Iglesia.

Por eso, yo titulé este mensaje, "Regresando al diseño"... Regresando al diseño.
Y escribí una introducción, que en lugar de comentarla la quiero leer exactamente como la escribí, porque creo que es más simple, más práctico, y la vamos a entender perfectamente bien:
Es innegable que estamos viviendo días de desconcierto, acontecimientos que se suceden unos detrás de otros sin permitirnos, casi, reponernos de unos para vivir los otros.
En la sociedad en general, hay alteración, confusión, incomprensión, miedo, en distintos lugares se experimentan huracanes, tornados, inundaciones, terremotos y nadie está pudiendo frenar estos fenómenos naturales. Por otro lado, hay un desenfrenado avance de la corrupción, la violencia, los ataques terroristas, el narcotráfico, la inmoralidad y la injusticia.
Por la Palabra de Dios sabemos que el mundo está experimentando el resultado de sus propias acciones, creo que eso, en estos días hemos llegado a esa conclusión, el mundo está experimentando el resultado de sus propias acciones.

Y voy a leer un pasaje que hace poquito, aquí también Hernán lo leyó, pero necesitamos hablar de este pasaje, para saber nosotros dónde estamos parados y por qué en el mundo están pasando todas las cosas que están pasando.
Romanos, el capítulo 1, versículos 18 al 23 y luego del 28 al 32, en la Nueva Versión Internacional, dice así:

“Ciertamente, la ira de Dios viene revelándose desde el cielo
contra toda impiedad e injusticia de los seres humanos,
contra toda impiedad e injusticia de los seres humanos,
que con su maldad obstruyen la verdad.
Me explico: (dice Pablo)
lo que se puede conocer acerca de Dios es evidente para ellos,
pues él mismo se lo ha revelado.
Porque desde la creación del mundo las cualidades invisibles de Dios,
es decir, su eterno poder y su naturaleza divina,
se perciben claramente a través de lo que él creó, de modo que nadie tiene excusa.
A pesar de haber conocido a Dios,
no lo glorificaron como a Dios ni le dieron gracias,
sino que se extraviaron en sus inútiles razonamientos,
y se les oscureció su insensato corazón.
Aunque afirmaban ser sabios, se volvieron necios
y cambiaron la gloria del Dios inmortal
por imágenes que eran réplicas del hombre mortal,
de las aves, de los cuadrúpedos y de los reptiles.”

Paso al versículo 28:

“Además, como estimaron que no valía la pena tomar en cuenta el conocimiento de Dios,
él a su vez los entregó a la depravación mental,
para que hicieran lo que no debían hacer.
Se han llenado de toda clase de maldad, perversidad, avaricia y depravación.
Están repletos de envidia, homicidios, disensiones, engaño y malicia.
Son chismosos, calumniadores, enemigos de Dios,
insolentes, soberbios y arrogantes; se ingenian maldades;
se rebelan contra sus padres;
son insensatos, desleales, insensibles, despiadados.
Saben bien que, según el justo decreto de Dios,
quienes practican tales cosas merecen la muerte;
sin embargo, no solo siguen practicándolas,
sino que incluso aprueban a quienes las practican.”
Romanos 1: 18- 23 y 28 - 32 / NVI

¿Qué les parece? Esto es estremecedor. Puse énfasis en lo que leí porque nosotros como hijos de Dios y como Iglesia, necesitamos tener un discernimiento espiritual de lo que está ocurriendo en el mundo, Dios dijo, no quieres, pues Yo no puedo hacer más.
¿Qué es lo que notamos aquí? Una inconsciencia deliberada, lo hago aunque sé que no debiera hacerlo, no me importa lo que Dios dice, eso es una inconsciencia deliberada, pero además, una determinación de continuar en la maldad.
Todos nosotros sabemos que en el Reino de Dios, que es justicia, en la oración del Padre Nuestro, Jesús dijo, que mi voluntad se haga en la Tierra como se hace en el cielo. En el cielo nadie pone en tela de juicio la voluntad de Dios, y Dios dijo, que como mi voluntad se hace aquí en el cielo que se haga en la Tierra.

¿Pero qué le pasó al ser humano? Dios le dijo, has mi voluntad, has mi voluntad, te va a ir bien, has mi voluntad... pero como el hombre no quiso hacer la voluntad de Dios, ¿saben qué dijo Dios? Está bien, has tu voluntad, que tu voluntad te sea hecha.
Eso es lo que está pasando, porque Dios, que es bueno, que es rico en misericordia, tampoco va a obligar ni forzar a ningún ser humano a hacer su voluntad, el ser humano tiene elección, libre elección, por eso tiene voluntad de elegir.
Muchos hoy se están preguntando, ¿y dónde está Dios en esto que está pasando? No me conteste, yo le preguntaría a usted, ¿qué le respondería a la gente que le pregunta eso? Después de la reunión me lo dice. Pero es importante que como hijos de Dios seamos entendidos de los tiempos que estamos viviendo, porque si no tenemos discernimiento, si no tenemos luz, vamos a confundir pensamientos y espíritus y los vamos a mezclar en el atolondramiento, en la confusión que el mundo tiene.
Dios dijo, ¿no quieres hacer mi voluntad? Yo te sigo amando y siempre te amaré, pero ahora, que se haga tu voluntad, por eso, Dios los entregó a sus pasiones.

Déjeme hacer una reflexión que en este momento viene a mí espíritu, muy fuerte.
¿Cuál va ser el resultado de las futuras generaciones, de las parejas que tienen niños y que son homosexuales? ¿qué les van a transmitir a sus hijos, qué principios, qué valores? Ah, él va a elegir...
Le pregunto, un narcotraficante que hoy se está enriqueciendo con el narcotráfico, ¿qué le está heredando a sus hijos? Pensemos lo que está pasando, porque cada acción nuestra, Iglesia, tiene un resultado, cada acción nuestra tiene un resultado, uno piensa que no, que es inocente, pero no es así. Por eso yo le pregunto al homosexual a quien Dios ama, a quién Dios ama, si bien está en contra del pecado, eh, joven, señorita, lesbiana, usted ¿a dónde está llevando a su hija o a su hijo que adoptó, a dónde, cuál es el modelo? El diseño de Dios no es el que usted estableció en la depravación de su mente, el diseño de Dios es otra cosa, porque todo diseño cumple un propósito.
Le preguntaría al narcotraficante, señor narcotraficante, usted se enriqueció y se sigue enriqueciendo con el narcotráfico, pero ¿qué le va a heredar a su hijo o a su hija? Miedo, que lo agarre la policía, que cuando se acueste no pueda vivir tranquilo, salvo que su consciencia se cauterice para seguir haciendo lo que ese padre hacía. Estoy hablando de cosas extremas y delicadas. Pero si hablamos de cosas menores, ¿qué ejemplo estamos dejando a las siguientes generaciones con actitudes que tenemos y palabras que decimos?
Entonces, Dios, que es rico en misericordia dijo, ésa es tu libre decisión, te dejo librado a tu suerte, pero no está diciendo, no te voy a recibir. ¿Sabe lo que está esperando Dios? Y lo digo así, que esa persona se golpee la cabeza contra la pared y regrese, eso es lo que está esperando, porque si no es por convicción, no es por obligación, tiene que ser por convicción.

Ahora bien, en medio de toda esta situación está la Iglesia, porque aunque no somos del mundo, estamos en el mundo, entonces, ¿qué participación tiene la Iglesia en todo esto? ¿Cómo se comporta o cómo se debiera comportar la Iglesia con todo esto que está pasando?
Bueno, cuando estaba preparando esto, ¿saben a dónde me llevó el Señor? Al principio, al principio, a la creación, para ver a Dios. Todos sabemos que Dios creó con la Palabra de su poder, y al final hace ese muñeco de barro al que sopla vida, Adán y de Adán toma a Eva.
Hay algo maravilloso que pasa, todo lo Dios crea lo hace a través de su Palabra, porque dijo, sea... Pero cuando va a la creación del ser humano, Él no dijo sea, Él se involucró, por eso le dio -escuche bien- su imagen y su semejanza, le dio lo que Él tiene, la naturaleza espiritual, el carácter moral, la capacidad y la habilidad de hacer las cosas como Él las hace.
Usted y yo tenemos esa capacidad metida adentro desde la creación, no importa si el narcotraficante está haciendo lo que está haciendo o el homosexual y la lesbiana está haciendo lo que está haciendo o el secuestrador está haciendo lo que está haciendo, todo ser humano tiene la imagen y la semejanza de Dios para trabajar, para funcionar como Dios lo hace.

Pregunto, ¿Dios es bueno, sí o no? Porque Dios podría haber dicho para el hombre, sea; como dije de la luz que sea... Pero para el ser humano dijo, no, me involucro le pongo de lo que Yo tengo.
Entonces, ¿Dios es bueno o es malo? ¿Nos dio algo bueno o nos dio algo malo? La imagen y semejanza, parte de la misma esencia de lo que Dios es.

Por eso, conocer a Dios será la mejor herencia que podamos dar a nuestros hijos, pero necesitamos conocerlo nosotros. Por eso, cuando el mundo dejó de conocer a Dios, hoy vemos las consecuencias.
Entonces, cuando Dios le pone la imagen y la semejanza dice, aquí hay un diseño para que cumpla un propósito, porque toda cosa o persona está diseñada para cumplir un propósito.
Hago un ejemplo, yo estoy parado frente a un atril o podio o púlpito, Ok, alguien diseñó este aparato, ¿para qué? Para que yo me pudiera parar aquí, hablarles a ustedes, tener la Biblia aquí, tener mis apuntes, tener los anteojos, es decir, ése es el propósito.
Entonces, Dios todo lo hizo con un diseño determinado que es perfecto y con un propósito determinado. Por eso luego dice Génesis, y los bendijo... Ah, la bendición viene del principio, y bendijo Dios al hombre y a la mujer, después le dijo, que fructifiquen, que multipliquen, que dominen la tierra... bueno, todo lo que nosotros sabemos.
¿De qué estamos hablando aquí yendo a la creación?
De que Dios es un Dios de diseños perfectos, Dios es un Dios que no hace las cosas porque sí, Dios es un Dios bueno, Dios es un Dios amante, y todo lo que en Él estaba se lo transmitió al ser humano.
¿Cuál era la única condición para funcionar en el diseño? La comunión con Él, escucharlo a Él, no escuchar otras voces, ahí fue donde vino el problema, cuando Eva escuchó otra voz y el marido escuchó la voz de la mujer engañados para caer en el pecado.

Claro, sabemos que Dios tenía el remedio, porque dice la Palabra que el Cordero fue sacrificado, entregado desde la fundación del mundo, luego, hace dos mil años Cristo viene y se entrega, pero la redención estaba prevista para este desastre que el hombre había hecho. De todas maneras, las consecuencias del pecado, sí están, sí existen y tenemos que ver qué hacemos con ellas.
Ahora bien, saliendo de este principio que para mí fue fundamental, hay una generación destacada.

Después de Adán y Eva y de sus hijos, la generación de Noé, creo que todos hemos leído o hemos escuchado hablar de la generación de Noé, y creo que una de las características de la generación de Noé, es que fue gente que nunca le interesó lo que Dios dijo.
Es más, Dios hablando de esa generación, lo voy a leer, porque en Génesis 6: 11 y 12 se describe a Dios observando el comportamiento de la gente de la época de Noé; y dice que la Tierra, es decir, la gente, estaba corrompida, llena de violencia o de injusticia y pervertida.
Ya en la época de Noé sucedía esto que hoy en día vemos entre nosotros, porque a veces podemos decir, ay, los tiempos de antes eran mejores... bueno, no sé, el corazón del hombre siempre se ha inclinado al mal.
Aquí la Tierra estaba corrompida, la gente estaba corrompida, la gente vivía en injusticia y en violencia y en depravación, ¿qué hace Dios? Le dice a Noé, Noé, aquí viene un diluvio porque esta sociedad no puede permanecer, hazte un arca porque esa arca y tu mensaje, puede ser un mensaje de salvación o de perdición para la gente.
Pero lo que me llama la atención, no es solamente lo que dijo Dios de la gente de ese tiempo, me llama la atención lo que dijo Jesús de los días de Noé.
Y ahora leo Mateo capítulo 24, versículos 37 al 39, Biblia en Lenguaje Actual, escuchen con atención:

“»Cuando yo, (dice Jesús)
el Hijo del hombre, venga otra vez,
la gente estará viviendo como en la época de Noé.
Que seguía comiendo, bebiendo y casándose,
hasta el momento mismo en que Noé entró en el gran barco;
y luego vino la inundación en que llegó el diluvio y todos se ahogaron.
Algo así pasará cuando yo venga otra vez.”
Mateo 24: 37-39 / BLA

Esto es profético, Jesús dice que antes de venir la gente estará, ¿cómo? Como en los días de Noé.
Queridos, comida, bebida, casamiento. ¿Qué significa eso? Yo quiero vivir la vida -hace algunos años era la vida loca de Ricky Martin, hoy no qué cosa habrá porque es lamentable escuchar lo que hoy se está escuchando, pero bueno-. Pero miren, ¿sabe cómo se llama esto? Hedonismo.
El hedonismo se caracteriza por querer disfrutar del placer como un fin supremo; a ver, que pase rápido la inundación, que pase rápido todo porque quiero volver a la normalidad. ¿Qué es volver a la normalidad? A comer, a beber, a vestirme, al negocio, y no es que esté mal, pero es otra vez eso el centro de mi vida porque mi corazón está torcido.
No reflexionamos, Dios ¿cuál es tu mensaje?, Dios, ¿qué nos quieres decir? Ah, ¿dónde está Dios, por qué muere tanta gente? ¿Usted está entendiendo, verdad? Si usted tiene discernimiento usted va a juzgar correctamente, Dios es bueno, por eso inicié con el principio de creación.

La Iglesia hoy en día no puede ser ignorante de los tiempos, tenemos que ser entendidos en los tiempos. Por eso hermano, si usted no conoce la Palabra usted no será entendido en los tiempos, vivirá de un mensajecito, agarrará un mensajecito en internet, y de acuerdo a interpretaciones extrañas, porque pareciera ser que hoy todo es para sentirnos bien. Y no es que Dios no sea bueno, pero sabe qué, el mundo va a terminar como tiene que terminar.
Es más, ayer hubo una profecía dada por no sé qué loco, que el mundo iba a terminar en el día de ayer, ¿ustedes se enteraron de eso? De cuando los astros se alinearían con no sé con qué cosa... hoy es 24 de septiembre y estamos aquí. Porque el mundo ha escuchado voces y se ha metido en miedo cuando debiera escuchar a Dios para saber que está parado en una Roca firme, aunque venga la tormenta.
Pero Jesús dijo, antes de que Yo venga, la gente está casándose, comiendo, bebiendo, de fiesta, a ver, qué pase todo esto, necesitamos volver al deporte, necesitamos volver al negocio, necesitamos que los restaurantes estén llenos, que los negocios estén llenos, que la gente siga comprando, ey, ey, ey...
No, paremos un poquito, y yo me pregunto, ¿dónde está la Iglesia? ¿Estaremos igual que esta gente o estaremos haciendo y pensando según Dios?
Ve que es serio lo que estamos hablando, éste no es un mensaje de desesperanza, es un mensaje para situarnos para regresar al diseño, vivir en el diseño, la gente de los días de Noé vivía así, hoy antes de la venida de Jesucristo, la gente vive igual.

Ahora bien, la historia continúa después de los días de Noé, y Dios en su plan y diseño elige a un pueblo llamado Israel, no lo eligió por ningún merecimiento, simplemente por gracia. Dios determinó que el pueblo de Israel era escogido entre las demás naciones para que lo representara, pero miren el vocabulario amoroso, tierno, delicado de Dios hacia el pueblo de Israel cuando salió de Egipto.
Leo Éxodo capítulo 19, versículos 1 al 6, Nueva Versión Internacional, escuchen con atención:

“Los israelitas llegaron al desierto de Sinaí
a los tres meses de haber salido de Egipto.
Después de partir de Refidín, se internaron en el desierto de Sinaí,
y allí en el desierto acamparon, frente al monte,
al cual subió Moisés para encontrarse con Dios.
Y desde allí lo llamó el Señor y le dijo:
Escuche, escuche hermano:

«Anúnciale esto al pueblo de Jacob;
declárale esto al pueblo de Israel:
“Ustedes son testigos de lo que hice con Egipto,
y de que los he traído hacia mí como sobre alas de águila.
Si ahora ustedes me son del todo obedientes, y cumplen mi pacto,
serán mi propiedad exclusiva entre todas las naciones.
Aunque toda la tierra me pertenece,
ustedes serán para mí un reino de sacerdotes y una nación santa”.
»Comunícales todo esto a los israelitas».”
Éxodo 19: 1-6 / NVI

Y yo digo, ¡Gloria a Dios! ¡Qué lenguaje! ¡Qué corazón expuesto el de Dios para hablarle a un pueblo que había estado esclavo en Egipto con una mentalidad esclava! No podían pensar, no podían decidir, tenían que comer de lo que les daban como esclavos, pero Dios los saca de Egipto con mano fuerte, hasta los saca ricos, porque le pedían cosas a las egipcias y se los daban, ése es Dios. Y Dios les habla con un vocabulario fino y les dice todo lo que Él tenía en su corazón, y cómo los hizo libres.
Y dice: los traje como si fuera sobre alas de águila. Todos sabemos que las águilas vuelan muy alto, pueblo de Israel, Yo sobre mí te llevé tan alto que nadie te podía tocar, no corriste ningún peligro porque estabas sobre mis alas... Ése es el cuidado tierno de Dios, Dios lo saca de la esclavitud al pueblo pero lo lleva tiernamente sobre sus alas para que se sintieran seguros, para que se sintieran amados, para que se sintieran protegidos, como sobre alas de águilas.
Pero les dice, pero ustedes me tienen que ser del todo obedientes, y cumplir lo que Yo digo.
Es decir, el diseño no lo puedo romper, la obediencia es parte del diseño, cumplir lo que Dios dice es parte del diseño para que nos vaya bien. ¿Estamos entendiendo esto? Cualquier transgresión a esto pagaremos las consecuencias.

Pero luego dice, ustedes van a ser propiedad exclusiva mía, en la otra versión dice, especial tesoro.
Ah, a ver mujeres, si tu marido te diría para mí eres especial tesoro, ¿te gustaría o no? Estela para mí es especial tesoro, ¡ah! ¿ve? Eso le dijo Dios a... Ay, las mujeres me miran serias como diciendo... ¡ay!
Es que es así Dios, actuaba así con Israel, les dijo, ustedes son mi propiedad, ustedes no se pueden casar con nadie, Yo los elegí, Yo los escogí, son mi propiedad, pero son mi especial tesoro, en ustedes está mi corazón, pueblo.
Les digo esto, y hasta las lágrimas me saltan, porque ahí está el corazón de Dios. lo puedo ver, especial tesoro...

Pero luego dice, ustedes serán para mí, un reino de sacerdotes y gente santa.
Pregunto, ¿la Iglesia no es para Dios, primero, propiedad de Jesucristo, segundo, su especial tesoro? Y luego, ¿no somos un reino de sacerdotes y gente santa? Ah, o sea, que no se quedó en Israel, o sea que esto pasa a la Iglesia. Pero todavía estamos en el Antiguo Pacto, ustedes me van a ser un reino de sacerdotes, es decir, una nación intercesora, una nación que esté, escuche, entre Yo, Dios y la gente, entre las demás naciones de la Tierra y ustedes, tendrán que interceder por las demás naciones porque ustedes, dice Dios, son mis representantes. Esto es parte del diseño de Dios para ustedes, un reino de sacerdotes, pero además gente santa, ¿qué significa esto? Apartada, separada, escogida con un propósito.
Ustedes no se pueden contaminar porque han sido escogidos, seleccionados por mí y para mí, ése era un privilegio. Si alguien te dice, mira yo te selecciono y yo quiero que sigas como un seleccionado y que no te contamines, ¿uno no se siente privilegiado? ¡Ah! Pero parece que Israel no lo vio, parece que Israel a lo largo de la historia falló en entrar en el diseño y el propósito de Dios.

Seguimos avanzando en la historia, ahora leo 2 de Reyes 17 del 7 al 13, Nueva Versión Internacional, dice así:

“... los israelitas habían pecado contra el Señor su Dios,
que los había sacado de Egipto, librándolos del poder del faraón, rey de Egipto.
Adoraron a otros dioses
y siguieron las costumbres de las naciones que el Señor había expulsado delante de ellos,
como también las prácticas que introdujeron los reyes de Israel.
Además, blasfemaron contra el Señor su Dios,
y dondequiera que habitaban se construían altares paganos.
Desde las torres de vigilancia hasta las ciudades fortificadas,
y en cada colina y bajo todo árbol frondoso,
erigieron piedras sagradas e imágenes de la diosa Aserá;
y en todos los altares paganos quemaron incienso,
siguiendo el ejemplo de las naciones que el Señor había desterrado delante de ellos.
Fueron tantas las maldades que cometieron que provocaron la ira del Señor.
Rindieron culto a los ídolos, aunque el Señor se lo había prohibido categóricamente.
Por eso el Señor les dio esta advertencia a Israel y a Judá
por medio de todos los profetas y videntes:
Escuche:
 «¡Vuélvanse de sus malos caminos! Cumplan mis mandamientos y decretos,
y obedezcan todas las leyes que ordené a sus antepasados,
y que les di a conocer a ustedes por medio de mis siervos los profetas».”
2 Reyes 17:7-13 / NVI

Cuando yo comparo esta última petición de Dios al pueblo con todo lo que dice antes, que fue catastrófico porque el pueblo hizo de todo menos parte, ni siquiera partecita, de lo que Dios les había dicho humanamente, ¿qué podría esperar uno? Ahora Yo te vengo con juicio, ahora Yo... porque Yo te lo advertí y como yo te lo advertí llegó la hora.
Mire el corazón de Dios, ¿qué le dice? Vuélvanse ¡Vuélvanse de sus malos caminos! Cumplan mis mandamientos y decretos... obedezcan, otra vez, obedezcan todas las leyes que ordené a sus antepasados, y que les di a conocer a ustedes por medio de mis siervos los profetas».

¿Qué vemos aquí? Un pueblo, reino de sacerdotes y gente santa, que se mezcló, se mezcló.
Cuando yo vi esto cimbré, un pueblo reino de sacerdotes y gente santa, se mezcló, levantaron altares paganos, rindieron culto a los ídolos, hicieron imágenes, y Dios les había dicho no lo hagan, se los había anticipado y ellos así y todo lo hicieron.
¿Qué hizo Israel? Quebrantó el diseño y perdió el propósito.
Cuando estaba viendo esto, inmediatamente como rayo vino a mi mente -no lo busquen- 1 Reyes 18.
En Primera de Reyes 18 hay una escena tremenda, el profeta Elías está desafiando a Baal y a cuatrocientos cincuenta profetas de Baal y cuatrocientos profetas de la diosa Aserá, que era diosa de la fertilidad. Los está desafiando porque faltaba lluvia, faltaba agua, y Dios le había dicho a Elías, Yo sé lo que voy a hacer, ahí arman todo el asunto para el holocausto, y Elías les dice a ellos, a ver pídanle a Baal que mande fuego del cielo y consuma esto; y dice que se sacaban con cuchillos y decían, Baal respóndenos, Baal respóndenos, Baal respóndenos, y Baal no respondía.
¿Qué hizo Elías? Le echó agua al holocausto, como diciendo ahora van a ver lo que es bueno, dijo Señor, como Tú me dijiste, que pase lo que tiene que pasar, y vino el fuego y consumó todo.

Pero me detuve a ver lo que significa el nombre Baal, esto es tremendo, porque el nombre Baal significa amo, poseedor y esposo.
Amo, poseedor y esposo, ¿acaso Dios no había dicho, ustedes son mi propiedad? ¿Cuántas veces la Biblia describe a Dios como esposo de Israel? Ah, ve lo que estaba pasando. Por eso, Elías antes de consumarse el holocausto reúne al pueblo, aunque tenía un rey llamado Acab influenciado por Jezabel, esto es para otro mensaje, influenciado por la hechicera Jezabel que adoraba todo menos a Dios, y entonces, cuando todo esto sucede hay algo tremendo que ve Elías.
Elías dice, ustedes tienen un rey, pero yo soy profeta de Dios, y les voy a decir una cosa, están tan confundidos que les voy a hacer una pregunta, ¿hasta cuándo estarán indecisos? ¿hasta cuándo estarán entre dos pensamientos? Mire lo que les dijo, si Baal es dios síganlo y sírvanlo, y si es Dios vayan detrás de Él.
Me pregunto, ¿al pueblo de Dios hay que decirle eso? ¿me está entendiendo hermano lo que digo? ¿Me está entendiendo? Al pueblo de Dios hay que decirle, decidan si Baal, el ídolo, es dios síganlo, y si Dios es el Dios verdadero síganlo a Él. Me estremeció, porque se me hace que hoy en día esto también está llegando a la Iglesia, porque hay que derribar Baales, salvo que los queramos seguir erigiendo y levantando, piense en todos los baales de aquí a que terminamos, que usted tiene aquí (cabeza) y aquí (corazón), qué baales.
Un Baal es algo que reemplaza a Dios, todo ídolo reemplaza a Dios, y no es solamente la imagencita lo que está acá (corazón) y lo que está acá (cabeza), un hijo puede ser un ídolo, dinero obviamente, piense, piense todo...

La gente hoy, ahora con la inundación, ay la casa, ay la casa, ay la casa... y sí, ¿pero que la casa es todo? ¿Si te destruyen la casa qué? Me están mirando como diciendo, Daniel qué estás diciendo, que cruel, que cruel no... Porque si mi corazón está en la casa que se pierde, entonces no está en Dios, que es mi casa.
Tengo que hablar así porque estamos en un tiempo de definiciones, y esto está siendo visto por mucha gente y que Dios tome esto para que la Iglesia sea cimbrada, porque hoy le estoy hablando a la Iglesia de Jesucristo. Si Baal es dios, síganlo, y si es Dios, entonces síganlo y sírvanlo.

Muy bien, ya dejo el Antiguo Testamento y me vengo al Nuevo Testamento, y recordé aquél momento histórico cuando Jesús dijo, Yo edificaré mi iglesia.
Allá en la antigüedad era un pueblo, Israel, Jesús dijo, Yo edificaré mí Iglesia, un Cuerpo, y agregó: y las puertas del Hades, las puertas de la muerte, las puertas de la... "La puerta" es autoridad. No podrán contra la Iglesia. La Iglesia somos ustedes y yo, no es paredes, toda la autoridad de la muerte y del demonio, dijo Jesús, no podrán contra la Iglesia, miren la posición en la que nosotros estamos.
Jesús hizo esa declaración, que Satanás que ya estaba vencido legalmente, creo que, perdón por la figura, se tapó los oídos para no volverlo a escuchar, porque Jesús dijo, Yo la voy a edificar. Por eso Él es el fundamento de la Iglesia, no son las filosofías orientales, no es el yoga, no es la meditación trascendental, hay muchas cosas que hoy nos están engañando, muchas cosas que nos quieren sacar de la verdad. Entonces, cuando Jesús dijo, Yo edificaré mi Iglesia y las puertas del infierno, todo tipo de autoridad, no podrán contra la Iglesia, le estaba dando a la Iglesia la facultad de representarlo como el pueblo de Israel tenía que ser representante de Dios.
Queridos, ustedes y yo somos los representantes de Él, que sigue edificando la Iglesia.

Pero la calificó y dijo varias cosas.
Dijo, no solamente ustedes son reyes y sacerdotes, ya vimos todo eso, ustedes además, son columnas del templo de Dios, ustedes son los sostenedores de la verdad, ¿me está escuchando lo que digo? Columnas y sostenedores de la verdad, ustedes Iglesia, son piedras vivas no ladrillos, porque los ladrillos son uniformes, las piedras tienen diferentes formas que se van acoplando unas con otras y nosotros somos piedras vivas, ¡qué privilegio!
Pero Jesús dijo además, que nosotros somos la sal y la luz del mundo, ésa es la facultad nuestra, ése es el diseño perfecto de Dios para la Iglesia, no hay más ni mejor.

Mire hermano, yo me he parado con una determinación que caerán diez mil a mi diestra y cien mil a mi izquierda, pero yo sé a quién he creído. Me duelen muchas cosas, me duelen ver deserciones, me duelen ver traiciones, me duele ver tantas cosas, cómo la gente hoy está liviana, todavía estamos hablando de si vengo o falto a la reunión, mire de qué estamos hablando, pero a mí no me importa, porque el que murió por mí es Jesús, el que me redimió y el que me escogió es Dios, y yo no le voy a fallar a Dios por fallas humanas. Pero digo yo, sabe que tendría que decir la Iglesia, nosotros, todos, todos.

Ahora bien, es hora de que la Iglesia vea o recupere su lugar con el diseño divino y el propósito, si usted hermano donde quiera que me esté escuchando, se conformó con sentarse en una silla y que le hayan dado un ministerio, y usted dice, con eso estoy sirviendo al Señor, le digo que se ha quedado corto, porque los tiempos que vienen son de un protagonismo como nunca antes, no acabamos de salir de lo que pasó en Barcelona, el atentado, y mire todo lo que se vino, ¿dónde está parada la Iglesia? ¿Cómo está parada la Iglesia? O metemos la cabeza abajo de la tierra como es avestruz o salimos a hacer lo que tenemos que hacer, columnas y defensores de la verdad, piedras vivas, sal y luz.

Sabe que esta parte es sumamente importante para que yo vuelva al diseño o lo reconozca, tengo que ser obediente, yo no puedo ver el diseño de Dios desde mi óptica, desde el entorno que yo me he fabricado, la obediencia a Dios está exenta de todo argumento, pensamiento o criterio humano, o sujeto a opiniones de otras personas, la opinión de Dios y la obediencia a Dios es la obediencia a Dios así como Él la pide, que fue lo que hizo Abraham.
Pero para ser obedientes, la obediencia ocupa un espacio, si yo tengo baales y no los derribo, la obediencia no puede ocupar el lugar, hoy tengo que ver cuántos amos, poseedores y esposos tengo.
Repito, que el Espíritu le esté iluminado y vea sus baales, sus ídolos que levantó, ¿qué será? Véalos, aún pueden ser proyectos, ilusiones, véalos, porque si no se desaloja a Baal, la obediencia no puede ocupar su lugar, porque el pueblo de Israel hizo eso, Dios te creemos a ti, pero además vamos a adorar a otros dioses... La mezcla, la mezcla, lo que nos está dañando hoy es la mezcla, uno se da cuenta de la mezcla cuando habla con la gente, no hace falta, hacen falta quince palabras, veinte palabras, para saber donde está parada la gente, si tiene la mezcla, el vocabulario, la manera de pensar, si tengo afinidad espiritual estaremos hablando de las cosas del Reino, de los reyes y sacerdotes que somos, de los negocios del Padre, no si me falló tal o cual negocio, de los negocios del Padre, ¿y qué son los negocios del Padre? La gente.
Y pero yo tengo que... y me acabo de casar y acabo de tener un hijo y voy a tener tres o cuatro y... y... el negocio y... y bueno, y no tengo dinero y... y no ofrendo y no tengo dinero y no puedo viajar es muy lejos, y... Y Dios dijo, Yo no te llamé para excusas, cuando tú te involucraste en esto lo hiciste conscientemente, porque sino te repito lo que le dijo Elías, si Dios es Dios síguelo, y si es Baal vayan detrás de Baal, por eso es definirse.

Ya casi para ir terminando, mire lo que dice 1 de Juan 2:15 al 17 en la Nueva Traducción Viviente, mire lo que dice Juan:

“No amen a este mundo ni las cosas que les ofrece,
porque cuando aman al mundo no tienen el amor del Padre en ustedes.
Pues el mundo
Escuche...
solo ofrece un intenso deseo por el placer físico,
un deseo insaciable por todo lo que vemos,
y el orgullo de nuestros logros y posesiones.
Nada de eso proviene del Padre, sino que viene del mundo;
y este mundo se acaba junto con todo lo que la gente tanto desea;
pero el que hace lo que a Dios le agrada vivirá para siempre.”
1 Juan 2: 15-17 / NTV

Amén. Mire, acá no hay para dónde hacerle, esto es clarito, no amen al mundo ni las cosas que están el mundo, ustedes están en el mundo, pero no son del mundo, por eso ahí es donde tenemos que revisar el corazón y dónde estamos, de veras, Dios ya dijo todo el asunto es de nuestra parte.

Pero todo esto exige una definición. Yo creo Iglesia, que la Iglesia no puede rebajarse a ser menos que el diseño que Dios tiene para nosotros. Creo que hemos pecado de bajar el nivel del diseño, nuestros ojos han sido vendados y los baales nos invadieron, llámele lo que sea, pero hoy nosotros necesitamos levantar y subir, porque el mundo tendrá que ver una Iglesia que lo represente a Dios con el diseño que Él estableció para cumplir el propósito.
¿Por qué hay tanta frustración? Porque no se está estableciendo el diseño, y se está estableciendo un diseño erróneo para cumplir un propósito erróneo.

Quiero terminar, dice el apóstol Pablo, querido apóstol Pablo, Filipenses 2: 15 y 16 en la Nueva Traducción Viviente, dice así:

“Lleven una vida limpia e inocente como corresponde a hijos de Dios
y brillen como luces radiantes en un mundo lleno de gente perversa y corrupta.
Aférrense a la palabra de vida;
entonces, el día que Cristo vuelva,
me sentiré orgulloso de no haber corrido la carrera en vano.”
Filipenses 2:15-16 / NTV

Mire, así como Dios abrió su corazón, acá lo veo en el apóstol Pablo, Pablo abrió su corazón, estaba hablando de cosas un poquito extrañas con los filipenses, pero lo vuelvo a repetir, porque él abre su corazón y les dice, filipenses miren: Lleven una vida limpia e inocente. Wow, ¿quiénes son inocentes? Los niños, porque los niños creen todo. Esto es a lo que la Iglesia tiene que llegar, inocentes como niños para creerle a Dios en todo y ser obedientes como niños, y obedecer sin argumentar y sin preguntar, ¿por qué me pides esto?
Lleven una vida limpia e inocente, como corresponde a hijos de Dios.
Mire lo que dice, y brillen como luces radiantes en un mundo lleno de gente perversa y corrupta. Aférrense a la palabra de vida; hay otra versión que dice, mantengan con firmeza la palabra que es la fuente de vida.
Ahí está, manténganse, Iglesia, aferrados a la Palabra, tomados a la Palabra que es la fuente de vida.

Necesitamos regresar a la única verdad, ésta es la única verdad, la Palabra no son las filosofías, les pido en el Nombre de Jesús, Iglesia, descontaminemos los oídos, descontaminemos los ojos, fijemos la vista en el autor y consumador de la fe. Urge, urge a Dios, urge a Jesucristo, cabeza de la Iglesia, que la Iglesia brille otra vez como luminar en el mundo.

Y dice Pablo, si ustedes están aferrados a la Palabra de vida, entonces, el día que Cristo vuelva, ah, ah, el día que Cristo vuelva, la gente estará bailando, comiendo, haciendo negocios, y viene Cristo, entonces, ¿qué va a pasar? Pregunto, ¿cómo estamos preparados nosotros? No vengas Señor todavía, siempre el mismo ejemplo, ¿no? Déjame terminar unas cositas, ¿para qué? Lo leímos en Juan, el mundo pasa y todo lo que hay en él, lo dije hace un tiempo atrás, el señor Carlos Slim no se llevará el dinero a la tumba, el señor Donald Trump no se llevará ninguna propiedad a la tumba, nosotros menos, es más, no nos interesa, porque lo que tenemos en Cristo es mil veces superior a todo esto, pero necesitamos ver con la luz de Dios.

Por eso, en este día es necesario regresar al diseño, decirle al Señor, Señor yo sé que como a Israel me estás diciendo con amor, vuélvanse a mí porque Yo me vuelvo a ustedes.
Dios nunca ha sacado su corazón de la Iglesia, nosotros sí hemos sacado el corazón, de veras, de veras, hay dolor en el corazón de Dios y en el mío, porque lo único que hemos hecho con Dios es ser pedigüeños, dame Dios, dame, dame, mira lo que me falta, mira esto, mira lo otro, y Dios dice, te di todo, te di todo.
Y hoy Iglesia el Señor nos dice, vuélvanse a mí porque Yo con amor los espero; y yo sé que si como Iglesia volvemos al diseño original, se restablece el propósito, encontraremos satisfacción interior, y el mundo no será indiferente, el mundo vendrá al escapar de lo que tiene que escapar a la única fuente de solución y a la única Palabra de vida eterna que la tiene Cristo a través de la Iglesia.

Mire qué privilegio, por eso, yo quiero que nos pongamos de pie aquí en este lugar, y como una parte de representantes de la Iglesia de Jesucristo en la Tierra, vamos a orar, y yo le pido que cada uno de ustedes en la oración, derribe los baales que tiene que derribar, y otra vez ponga el fuego en el altar para decirle a Dios, así como estás diciendo que vuelva a ti, yo también te amo, estoy regresando al diseño, y eres lo único que en este mundo vale la pena.

Padre, en el Nombre de Jesús, estamos viviendo días históricos, días que hacen temblar el corazón y el alma, vemos miedo en todos los lugares, vemos lo que está pasando con la zozobra, con el desconcierto, vemos avanzar tanta corrupción e injusticia, pero como Iglesia de Jesucristo entendida en los tiempos, hoy Señor, nos has mostrado por tu Palabra que desde el inicio, desde la creación, a través de tu imagen y semejanza y luego con la sangre de Cristo aplicada, nos diste perdón de pecados, salvación y vida eterna para ocupar el lugar de miembros del cuerpo de Cristo, reyes y sacerdotes con autoridad, con poder para representarlo.

Pero también Señor, Tú nos has dicho que somos gente santa, somos tu propiedad, somos tu especial tesoro, Señor, perdón porque nos hemos mezclado, nuestros pensamientos se mezclaron, el alma se mezcló, los amores se mezclaron, y te hemos compartido y te hemos sido infieles como fue el pueblo de Israel, que te adoraba a ti pero también adoraba ídolos.

Señor, hoy realmente con consciencia queremos no solamente tener un acto de contrición, sino un acto de arrepentimiento, para regresar al diseño, que vibre en nuestro interior lo que son tus intereses, que vibre en nuestro interior todo aquello que somos como parte del cuerpo de Cristo, para mostrarlo al mundo, Señor esto no es una obligación es una convicción de amor.

Por eso Señor, hoy te decimos, queremos brillar, queremos ser la sal, queremos ser la luz, queremos ser la columna, queremos ser los sostenedores de la verdad.
Señor, nos oponemos a seguir y tener como objetivo la comida, la bebida, a casarnos, a darnos en casamiento, queremos verte a ti, queremos ver tus intereses, y si bien es cierto podemos en el mundo concretar negocios y quizá hasta disfrutar de una buena comida, pero jamás diremos, esto es el todo de mi vida porque el todo de mi vida eres Tú.

Señor gracias, porque estamos en un Pacto de Gracia, pero queremos ser leales hacia ti y a ese Pacto de Gracia, queremos ver otra vez la sangre actuando, la sangre de Cristo perdonando, por eso, en este momento hago un llamado: A cualquier persona que esté escuchando este mensaje, si usted no tiene a Cristo, si usted no se aferró de la Roca, si usted vive cimbrado por lo que está pasando, con temor y con temor al futuro y no sabe lo que puede pasar, venga a confiar en Cristo, porque tanto usted como el mundo se apartaron de Dios pero Él nunca se apartó de ustedes, pero vuelva a Dios y en Cristo encontrará perdón, salvación, redención y paz interior, aunque todo afuera esté en convulsión.

Señor, hoy nos paramos en este ámbito y declaramos al mundo, Jesús es Señor, Jesús es Señor, los baales son derribados, los baales no tienen parte ni suerte en nuestra vida, los hemos derribado, y cuando se asomen a nuestra vida los rechazaremos porque nosotros sabemos a quién pertenecemos.

Señor, gracias por el privilegio de ser tus hijos, gracias porque esperamos tu venida y sabemos que verte a ti será el mayor premio, el mayor privilegio que tendremos, ya con cuerpos renovados, con cuerpos glorificados, y verte a ti y pasar contigo toda la eternidad.

¡Qué esperanza maravillosa! No es la esperanza de este mundo donde la casa de derriba y tengo que volver a tomarla, es vivir contigo para toda la eternidad. ¡Qué precioso privilegio!

Oramos agradecidos, regresamos al diseño para cumplir el propósito, en el Nombre de Cristo Jesús, Señor y salvador, amén Señor, amén y amén. Alabado sea el Nombre del Señor. Amén.